Mario Chávez-Campos explota con intensidad la creación literaria al fundir en Muros de sed (De raíces fronteras y otros espejismos) un lenguaje influido notoriamente por la pluma rulfiana y la de Juan José Arreola, junto a una línea estructural enmarcada en lo mejor de Julio Cortázar. (Erick Alba, La Jornada, Michoacán)
Muros de sed es una novela policiaca que, utilizando el humor y el suspense acerca al lector a la realidad cotidiana de los migrantes mexicanos en los EE.UU. Desacraliza con mucho tino la falsa solidaridad entre paisanos y desvela con ironía la discriminación dentro de la discriminación.
Una novela de arraigo y des-arraigo, de exilio y búsqueda de raíces. Un espejismo de papel que le mostrará al que se acerque cuanto, más allá del boom mediático, desconocemos sobre este tema.