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vomcostarica

De los catorce años de encarcelamiento que sufrí en Rumania, bajo el régimen comunista, pasé tres años solo en una celda, a diez metros de profundidad, sin ver nunca el sol, la luna o las estrellas, las flores o la nieve, sin ver a otro hombre alguno excepto los guardias y los interrogadores que me castigaban y torturaban.
En esa cárcel rara vez se oía un ruido. Los guardias tenían calzado con suelas de fieltro y no se los escuchaba aproximarse.
No tenía una Biblia ni ningún otro libro. No tenía papel en que escribir mis pensamientos. Las únicas cosas que se esperaba que escribiera eran declaraciones acusándome a mí mismo o a otros.
Durante ese tiempo rara vez dormía durante la noche. Dormía de día. Todas las noches pasaba horas en ejercicios espirituales y oración. Cada noche componía un sermón y lo predicaba...He aquí algunos de esos sermones. Richard Wurmbrand