La «Fotografía de la Virgen», tal como en Garabandal y su entorno se la conoce, fue obtenida por Mariloli González Mazón estando con Jacinta también en éxtasis, acompañadas por el P. D. José Ramón García de la Riva (con cuya cámara se realizó) y por Conchita, todos en casa de esta.
Con la exploración de tan mítica instantánea —y la precursora posibilidad abierta para otras interesantes imágenes—, quisiéramos para ellas la atención e interés necesarios que parecen reclamar, en función de los resultados que ofrecen cuando se las explora o interroga a la búsqueda de lo no aparentemente visible.
Este análisis también nos anima el intentar reavivar aquellos increíbles hechos y fenómenos como el que nos ocupa, insuficientemente ponderados todavía en nuestros días.