¿Es acertado reducir la creación a una azarosa combinación de casualidades? ¿Es la grandiosidad de la existencia un mero juego de probabilidad?
La complejidad, refinamiento y belleza de la creación conforman un mecanismo tan bien engranado que se antoja demasiado elaborado como para atribuírselo únicamente al azar. El autor de esta obra nos plantea la vieja disyuntiva entre causalidad y casualidad desde el punto de vista del inicio mismo de la existencia.
Partiendo desde una perspectiva sencilla y amable, El libro de la vida trata de comprender las explicaciones que un organismo unicelular primitivo pudiese haber argüido para explicar su propia existencia, invitándonos a reflexionar sobre la intuición de aquella atávica idea en que la mano de un gran organizador justifica semejante obra, y sobre las evidencias de que una inteligencia creativa superior nos ha ido descubriendo en tan exuberante diseño.