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nestorcodero

Todos hemos estado ahí. Ese momento en el que eres atrapado por una ola de fascinación debido a las palabras que pronuncia esa persona. Eres un huésped observador que se maravilla al colisionar con una magnitud de emociones positivas que es indescriptible. Tus ideas mutan de un estado a otro experimentando múltiples facetas de ti mismo que ni siquiera sabías que existían. Sientes una admiración que incrementa exponencialmente mientras prestas una atención inquebrantable. Con un sentimiento de pasión arrebatador que alimenta tu alma de manera sustancial. Pero espera… se ha ido. La montaña rusa cautivadora en la que estuviste hace unos segundos ha desaparecido. ¿Qué ha pasado? Déjame explicarte… En palabras precisas, fuiste víctima exquisita del Carisma, mejor dicho, de alguien carismático.

Una parte muy interesante de mi vida la dediqué puramente al estudio del carisma y solo pude aprender una cosa: Es posible. Es posible aprender a ser más carismático y hábil socialmente, pero sobretodo, también se puede enseñar. El carisma no es algo indescriptible o indescifrable, es sin duda, bastante pragmático. Incorporar el carisma a nuestra personalidad mejorará la calidad de nuestra vida tanto laboral, como personal y social de una forma que jamás viviste antes. Debido a mis análisis, me vi obligado a conformar una guía con todos los conocimientos que me hubiese encantado saber hace 10 años.